¡Atención pollower dulcero! Guarda un espacio después de tu almuerzo que llegó la dosis de sabor perfecta para alegrar tus tardes frías. Hoy tenemos ocho opciones de postrecitos dispuestos a endulzarte la vida y llenarte de algunas calorías.

Algunos guardan dulces anécdotas de la Lima de antaño, que vio cómo se formaba la increíble repostería tradicional que disfrutamos hasta el día de hoy. Según historiadores, muchos de estos postres de influencia española nacieron en las cocinas de los conventos de la época y poco a poco se fueron comercializando usando ingredientes peruanos. ¿Listo para conocerlos?

Crema Volteada
De aquellos dulces acaramelados, biscochos, flanes y budines que abrían el apetito a los limeños de antaño, quedó la famosa crema volteada, un postre representativo de la gastronomía peruana de influencia española. Prueba una buena dosis de esta crema y verás cómo tu día da una vuelta y cambia por completo. ¡Para chuparse los dedos!

Suspiro a la limeña

¡Prepárate para probar otro de los postres más importantes de la gastronomía peruana! Cuenta la historia que el nombre proviene de un verso del poeta republicano José Galvez, quien luego de probarlo expreso que era “suave y dulce como el suspiro de una mujer” ¡No es casualidad que nuestro postre siga enamorando a peruanos y extranjeros con su sabor!

Torta de chocolate

Este postre es conocido internacionalmente y se popularizó a finales del siglo XIX. El noruego Erling Kagge, se llevó uno en su expedición al polo sur. Él fue el primero en explorar ese territorio, solo y sin ayuda exterior, y aún en estas condiciones extremas, él cumplió su deseo de llevar una torta de chocolate.
Los ingredientes del chocolate ayudan a aumentar el nivel de serotonina en el cerebro, por ello es ideal para brindarte las energías que a diario necesitas y todas las endorfinas que te harán feliz. ¿Te vas podrás resistir a este postre?

Tres leches

La torta de tres leches es un postre latinoamericano, que combina sabores y texturas. Si tu paladar busca algo más frio, prueba este clásico y esponjoso postre de textura húmeda, lleno de crema de tres leches y el infaltable merengue. ¡Sentir que se derrite en tu boca será una dulce experiencia de aquellas!

Cheesecake

Este postre es milenario. Se dice que fue clave para la nutrición de los deportistas en la antigua Grecia que participaban en los Juegos Olímpicos. Prueba esta delicia a base de queso suave y cremoso con el intenso sabor y color de las fresas que lo convierten en un clásico, así es nuestro irresistible Cheesecake de Fresa. Además, otra dulce experiencia te espera con el Cheesecake de Sauco. Esta es la segunda presentación de este famoso postre en la cual la crujiente crema de queso es bañada con mermelada de sauco. ¡Larga vida al Cheesecake!

Finalmente, para terminar de engreírte y calmar ese antojo dulcero, también puedes probar nuestra Bruselina de chocolate y lúcuma, el clásico Pie de limón o una copa de helado que hasta en invierno es un verdadero placer.
Qué esperas para darle un toque diferente al final de tu almuerzo y disfrutar de esta experiencia dulce e inolvidable. Guarda siempre espacio para dulces momentos de los que no te arrepentirás. ¡Te esperamos en todos nuestros restaurantes con tus postres favoritos!

Todos tuvimos una abuela que cada domingo siempre nos engreía con sus exquisitos postres, pero la felicidad total llegaba cuando tocaba probar uno muy peculiar; blanco como la nieve y suave como una nube, siempre esponjoso y con sus toques de canela y merengue al que dulcemente lo llamaban Suspiro a la Limeña.

¿Te has preguntado como buen peruano cómo nace este postre que ha conquistado miles de paladares?

Su origen se remonta hasta hace dos siglos, donde su nombre original era Manjar Real del Perú. Sin embargo, cuenta la historia que el escritor y poeta José Gálvez Barrenechea, muy inspirado tras probar el postrecito, lo bautizaría con su actual nombre por lo suave y dulce que era como el suspiro de una mujer. ¡Así de seductor era nuestro querido postre!

Y si también te preguntas qué hace especial y único a este exquisito postre, pues es el manjar blanco, una crema espesa compuesta de leche, almendras y azúcar cuyo origen es medieval y fue introducido por los viajeros provenientes de España. Otro ingrediente que hace que suspiremos con su sabor es el infaltable merengue, que le da la fina dulzura que lo caracteriza.

“Toca el cielo con el suspiro a la limeña”

No cabe duda que el Suspiro a la Limeña se ha convertido en un clásico de nuestra gastronomía, al punto de ser considerado postre bandera del Perú. Su inspiradora historia y cautivador sabor tiene enamorados a peruanos y extranjeros hasta el día de hoy y no dudamos, con orgullo, de que así sea con futuras generaciones amantes del sabor de lo nuestro.

Con tanta historia y sabor, ¡Como no incluir al Suspiro a la Limeña en nuestra carta! Por ello te invitamos a acompañar tu platillo favorito con uno de los postres más tradicionales del Perú y sentir ese suspiro cautivador y suave derritiéndose en tu boca.